¿Qué es una estrategia de aplicaciones en la nube?
Alinear el ciclo de vida del desarrollo de software con una estrategia de aplicaciones nativas de la nube permite a las empresas acelerar su capacidad para diseñar nuevas y atractivas experiencias de usuario, mantener la agilidad de las operaciones comerciales e innovar a un ritmo rápido, todo ello a la vez que se reducen los costos. Por eso, en la realidad económica actual (con cada vez más disrupciones, transformación digital y nuevos competidores acechando en cada esquina), una estrategia de aplicaciones nativas de la nube es más crítica que nunca.
Las aplicaciones nativas de la nube aprovechan los beneficios de la computación en la nube: reemplazan la inversión de capital y los recursos necesarios para ejecutar plataformas de desarrollo y centros de datos locales con computación en ráfagas, así como servicios a pedido y de pago por uso.
La capacidad de activar y desactivar instantáneamente la potencia de desarrollo sin afectar la funcionalidad existente se logra dividiendo los componentes de la aplicación en partes más pequeñas, llamadas microservicios, unidas con API y herramientas nativas de la nube. Para que esto funcione, los desarrolladores deben asegurarse de que el diseño de la aplicación esté desacoplado de cualquier infraestructura física.
¿Por qué es importante una estrategia de aplicaciones nativas de la nube?
Ya sea que esté analizando su cartera actual de aplicaciones heredadas o esté considerando crear algo nuevo, la complejidad monolítica es el talón de Aquiles del desarrollo de aplicaciones tradicionales. Y los usuarios esperan una mayor funcionalidad, características innovadoras, tiempos de respuesta rápidos y ningún tiempo de inactividad.
Los problemas de rendimiento, los errores recurrentes y las demoras en la implementación ya no son aceptables y, si se encuentra en esta situación, la competencia rápidamente se quedará con una parte de su segmento de mercado. Las aplicaciones nativas de la nube se definen por su velocidad y agilidad, y permiten crear de inmediato nuevos modelos de negocio, productos o funciones.
Si bien las aplicaciones monolíticas heredadas pueden ser un excelente punto de partida, todas tienen problemas comunes que se agrandan con el tiempo:
Vulnerabilidad de los recursos
A medida que pasa el tiempo, el código cambia de manos muchas veces y la aplicación se vuelve cada vez más complicada, por lo que ningún desarrollador o arquitecto comprende la arquitectura o el código en su totalidad.
Problemas de implementación
A medida que la base de código se deteriora, realizar cambios en cualquier parte del código tiene una probabilidad muy realista de romper todo el monolito, con efectos secundarios no deseados y costosos. Cada versión termina siendo lo más pequeña posible y requiere una implementación riesgosa de toda la aplicación.
Falta de innovación
Con un riesgo cada vez mayor de que nuevas incorporaciones puedan hacer caer aplicaciones enteras, el apetito por nuevas características e innovación se erosiona rápidamente.
